lunes, 24 de noviembre de 2014

El futuro de las orillas del rio

El pasado domingo 23 de Noviembre fue el aniversario de la reconquista de Sevilla por parte del Rey Fernando III. Durante más de un año estuvo luchando contra los musulmanes que ocupaban nuestra ciudad, cuyo legado monumental y cultural les tenemos que estar muy agradecidos. A día de hoy, la ciudad vive en busca de algún héroe que nos libre de la invasión de veladores que empieza a conquistar lugares inimaginables. El ejercito formado por mesas y sillas empezaron invadiendo nuestras plazas para luego invadir con sus cuatro patas calles que antes invadían las cuatro ruedas. San Jacinto y la Avenida de la Constitución presentan una imagen más que preocupante, donde ni la estética ni el pasear son del agrado de los peatones.

Antaño las invasiones de la ciudad venían por el Guadalquivir, siendo su ribera lo primero por conquistar. Pero este nuevo ejército patrocinado por marcas de refrescos y de cerveza pronto va a poner su pica en la orilla del rio para instalarse bajo una sombrilla. Los proyectos del mal llamado Paseo del Arte de Torneo y la reforma de Marqués de Contadero se unen a la posible avalancha de estos soldados cuadrúpedos en la zapata Trianera. Al ciudadano no le quedará espacio público para pasear, correr o montar en bici. El rio siempre ha sufrido quejas vecinales para su rehabilitación y mantenimiento. Pero lo que deseamos es mas sombras en el Paseo Juan Carlos I, mejora del acerado, mejora del carril bici en el Muelle de la Sal y, por supuesto, que el río este limpio y nos traiga un ligero olor a mar desde Sanlúcar de Barrameda.


El Guadalquivir siempre ha ido ligado a la industria de nuestra querida ciudad, cuyo puerto mercante exportaba la marca Sevilla. A día de hoy, el río solo va a quedar para atraer a viajeros de cruceros y barcas de recreo que consuman en la industria sevillana del siglo XXI, el bar. Ojalá Fernando III se reencarne en algún político que luche contra este ejército que nos invade.

miércoles, 5 de noviembre de 2014

Muy ruidosa, muy desempleada, muy cutre, degradada y mariana ciudad de Sevilla

Durante muchos siglos de historia nuestra querida ciudad ha recibido varios títulos hasta convertirse en "la muy noble, muy leal, muy heroica, invicta y mariana ciudad de Sevilla". Títulos y atributos que quedan muy lejos de lo que podemos ver hoy en las calles. 

Lo primero de todo disculparme por este largo paréntesis en el blog. Aunque uno intente dar opinión critica desde este rincón de internet al dia dia de nuestra ciudad, a veces la actualidad de esta es tan decepcionante que uno le faltan calificativos. Hoy lo he encontrado, y ha sido gracias a adaptar su emblema a lo que podemos presenciar al pasear, ver, escuchar y leer.

Los altos índices de desempleo junto a la falta de educación pueden que sea la punta del iceberg de todos los problemas que hoy sufre nuestra querida ciudad. La desindustrialización y falta de políticas de reactivación de estos sectores, se une a la tercialización de la economía para dejar en manos del turismo nuestro futuro. Un turismo que queda asombrado por la Catedral, el Alcázar, el Archivo de Indias, las Setas, muchas de nuestras iglesias, etc… Que presentan un entorno perfectamente cuidado y limpio, ofreciendo una realidad muy distinta a la ruidosa y sucia ciudad que padecemos los sevillanos. Porque nos hemos convertido en una sociedad incivilizada y chillona que deja basura por las calles para que luego nuestro ayuntamiento decida multar a aquellos que por su desesperación le facilitan el trabajo a Lipasam.

Tenemos unas administraciones incompetentes capaces de destacar tanto por el tema de la basura como por su nefasta planificación a la hora de ejecutar el proyecto de la Torre Pelli y su correspondiente plan de movilidad. De circo que esto pase cuando el edificio está casi finalizado, pero sobre esto espero opinar más extensamente pronto. También tenemos el eterno debate que las diferentes administraciones nos ofrecen con el dragado. El caso es igual que el del rascacielos de La Cartuja, han construido una esclusa inútil si el dragado no se lleva a cabo.

Nefasta y patética, es la gestión política de una ciudad degrada y sin ilusiones donde se vende a bombo y platillo la creación de empleo que puede ocasionar una noria panorámica o la apertura de mercados gourmets. Algunas noticias desde la cuenta twitter del alcalde son más de pueblucho, que de la cuarta ciudad española que quiere ser un referente cultural en la Europa del siglo XXI. Para lo que ha quedado Sevilla, que pena más grande, pero para muchos mientras la Semana Santa y la Feria no la toquen esta seguirá siendo muy noble, leal, heroica, invicta y, por supuesto, mariana ciudad de Sevilla.